GRUPO No.3 PARTE CORREGIDA
LA COMUNICACIÓN
En el proceso administrativo de un centro educativo, resulta fundamental que el personal docente y administrativo incremente un proceso de comunicación bilateral que contribuya al logro de metas en común, mediante un proceso de dirección que busque tanto el desarrollo humano, como el desarrollo del centro.
En un centro educativo donde se procure la promoción de un ambiente participativo y auténtico, cada miembro de la institución debe sentirse parte actuante. El personal docente y administrativo procuran un proceso de comunicación bilateral, mediante las reuniones que se desarrollan en el centro educativo, las cuales pueden ser tantos formales como informales.
Generalmente, cuando en los centros educativos existe problema de comunicación se debe a que no se cumplen en cierta medida las instrucciones del director, o de los coordinadores de área, mejor dicho no se atienden las peticiones de los directores o coodinadores. Es por eso que para evitar estos problemas de comunicación los centros educativos interesados en tener una buena comunicación trabajan en la búsqueda de una comunicación bilateral que los ayude a tener un ambiente armónico en el centro.
LA ADMINISTRACIÓN DE UN CENTRO EDUCATIVO, EN LA BÚSQUEDA DE UNA COMUNICACIÓN BILATERAL:
La comunicación bilateral es uno de los principios que deben orientar el proceso de dirección de los centros educativos. El proceso de comunicación debe ser tanto descendente como ascendente. Esta doble función, permite que la administración, se olvide del viejo esquema de comunicación desde un punto de origen identificado como el director del centro educativo, base de cualquier intento de comunicación únicamente cuando sea de su incumbencia.
En el centro educativo, en su acepción como sistema social, todos los demás componentes también deben disponer de toda la libertad, confianza y seguridad para iniciar el proceso de comunicación en el momento que lo consideren necesario.
Solamente así, bajo estas circunstancias, se puede lograr un ambiente donde tanto la dirección, el personal auxiliar administrativo y los docentes, tomen decisiones, acepten responsabilidades grupales, participen en equipos de trabajo que busquen mejores rendimientos en los objetivos propuestos para el desarrollo del centro educativo.
El personal docente y administrativo se relaciona tanto en sus labores diarias como en las reuniones formales e informales.
Reuniones Formales:
Las reuniones formales procuran lograr un proceso de comunicación entre el administrador educativo, los docentes y viceversa. Estas reuniones son generalmente convocadas por la autoridad superior de la institución educativa, con el objetivo de comunicar los objetivos, proyectos, intereses, necesidades, problemas y otros temas de interés para la comunidad educativa.
Este tipo de reuniones se convierte, entonces, en el nexo que se establece entre el personal docente y administrativo para intentar entablar un proceso de comunicación bilateral eficiente, que permita generar procesos humanísticos que procuren lograr las metas que la institución educativa establece.
En este tipo de reuniones, la administración emplea la comunicación descendente con el fin de informar o influir sobre el personal docente. La comunicación que se desarrolla es directa y se preocupa con ésta transferir información de interés general y lo más importante es que se tomen decisiones que tienen como objetivo llegar a un acuerdo común para el beneficio de la organización.
Reuniones Informales:
Las reuniones informales por su parte, resultan ser procesos comunicativos donde tanto el personal docente como el administrativo, se relacionan de manera casual para intercambiar información de tipo escolar, sentimientos, necesidades y otros.
Las reuniones informales o “reuniones de pasillo” resultan ser verdaderos intercambios de comunicación, donde los participantes son los verdaderos protagonistas. Este tipo de reuniones generalmente se suscitan en pasillos, aulas, y otros lugares de reunión ocasional. Éstas surgen de manera expontánea y promueven relaciones de amistad y compañerismo. Estos intercambios son rápidos y están cargados de humor, interés, privacidad. Uno de los rasgos que distingue las reuniones de pasillo de las reuniones oficiales es que se eligen los interlocutores y que no existe, por lo tanto, la imposición institucional de establecer que actores deben participar en ellas.
Los educadores y educadoras rehúyen a las reuniones formales y se sienten mas dispuestos a asistir a las reuniones informales; sin embargo, las condiciones institucionales impulsan a los educadores únicamente a reuniones formales.
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